La ciudad de Nueva York dejó este miércoles, 7 de junio de 2023, estampas fantasmagóricas debido a la contaminación causada por los cientos de incendios que asuelan desde hace varios días la vecina Canadá y que han sido arrastrados por el viento a lo largo de más de 1.500 kilómetros hasta cubrir la Gran Manzana.
Times Square estaba bañado por una luz naranja, el sol parecía la pegatina de un círculo amarillo que apenas iluminaba entre la densa nube de humo que comenzó a envolver la ciudad, sobre todo a partir de las 12.00 hora local.
Los edificios de la ciudad vistos desde el Central Park parecían los mástiles de un barco fantasma. La ciudad olía a madera quemada, a incendio. Muchas farolas se encendieron automáticamente ante la oscuridad que invadió el ambiente en el momento más crítico.
Las mascarillas para protegerse de las partículas contaminantes volvieron a ocupar las aceras de la Gran Manzana, como no se veía en muchos meses, y numerosos centros públicos, como colegios, cancelaron sus actividades exteriores y suspendieron cualquier acto al aire libre.
Fotografía: El Porvenir