La Policía argentina utilizó este miércoles, 10 de abril de 2024, cañones de agua para dispersar una protesta en Buenos Aires mientras los movimientos sociales salían a las calles para oponerse a las medidas de austeridad del presidente Javier Milei.
Los manifestantes marcharon a lo largo de la avenida 9 de Julio, una de las más importantes de Buenos Aires, e interrumpieron el tráfico. Querían resaltar la difícil situación de la clase trabajadora y los sectores populares que, según dicen, son los más afectados por los recortes gubernamentales destinados a frenar la inflación galopante.
Javier Milei ha implementado medidas de austeridad que incluyen recortes dolorosos al gasto estatal, recortes de subsidios y poda del sector público.
Argentina está luchando para reducir uno de los niveles de inflación más altos del mundo, con una tasa anual de más del 275%, incluso cuando enfrenta una pobreza creciente, un estancamiento de la actividad económica y el impacto de estrictos controles de capital que obstaculizan los negocios.
Los disturbios de este miércoles dejaron 11 personas detenidas tras la aplicación de lo que se conoce en Argentina como el “plan antipiquetes” o protocolo para preservar el orden público.
Sacado de “Caracol”