Una investigación de la Fiscalía General de la Nación, permitió develar una compleja red criminal dedicada a la apropiación de lotes. Los llamados tierreros se quedaban hasta con predios destinados a la construcción de colegios en el departamento del Atlántico.
En la nómina de los criminales estaban notarios, inspectores de policía, funcionarios de la Oficina de Registro de Instrumentos Públicos, abogados y particulares.
Los investigadores del CTI lograron la captura de 18 personas entre funcionarios públicos y particulares que estarían enredados en este entramado corrupto y peligroso de criminales dedicados a la usurpación de predios, incluso de uso público en varios municipios del Atlántico y que mediante la violencia llegaban a las propiedades.
En el curso de la investigación se estableció que para quedarse con los predios del Estado fueron presentados documentos falsos que reconocían de manera gratuita la cesión del bien por parte de la autoridad local a un tercero.
Por: Juan Carlos Arenas