El Instituto Nacional de Salud de Colombia informó que se han confirmado 4.257 casos de viruela símica en el país, con la mayoría de casos en hombres de 20 a 49 años
En junio de 2022, Colombia registró sus primeros casos de viruela símica. Desde entonces, el Instituto Nacional de Salud (INS) ha mantenido una vigilancia constante de la propagación de esta enfermedad en el país.
Según datos del INS, hasta el 14 de agosto de este año, el número total de casos confirmados en el país asciende a 4.257, con 4.059 casos reportados en 2022, 89 en 2023 y 109 en 2024.
La gran mayoría de los contagios se detectaron en hombres, específicamente 4.119, y solo 138 en mujeres. Las ciudades más afectadas son: Bogotá, Medellín y Cali.
Los grupos etarios más afectados son los de 20 a 29 años, con 1.586 casos; los de 30 a 39 años, con 1.753; y los de 40 a 49 años, con 534 casos reportados. Para el 14 de agosto, solo cuatro de estos casos seguían activos y, según lo informado por el INS, no se han registrado muertes debido a la enfermedad en el país.
Reporte de casos de viruela símica en Colombia a 15 de agosto de 2024 – crédito INS
El brote en Colombia es parte de una crisis sanitaria mayor. En agosto de 2022, la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró una emergencia internacional por la propagación de la viruela símica. Desde entonces, la epidemia ha presentado desafíos significativos en varias partes del mundo, y Colombia no es la excepción.
En otro país, específicamente en la República Democrática del Congo, se reportó en septiembre de 2023 un brote relevante de esta enfermedad en las provincias de Kivu del Sur y Kivu del Norte. En este brote, se identificaron varias mutaciones de una nueva variante de Mpox, que se caracteriza por ser más letal. Hasta el momento, el INS ha aclarado que en Colombia no se han detectado casos de esta variante específica.
Es fundamental para las autoridades de salud pública mantener un seguimiento riguroso y promover campañas de vacunación y concienciación para limitar la propagación del virus. La vigilancia epidemiológica y las medidas preventivas son esenciales para controlar futuros brotes y mantener la salud pública en Colombia y en el resto del mundo.
Fuente: Instituto nacional de Salud
Por Juan Carlos Arenas